El objetivo principal de este post es el de transmitir la visión de un analista sobre cómo crear una estrategia de datos en base a la experiencia observada y, por supuesto, vivida en varios clientes de diversos sectores así como el impacto y recorrido en el día a día de las estrategias de datos implementadas de diferentes maneras en el proceso de transformación digital que se está viviendo en las empresas actualmente.
Las estrategias de datos constan de 4 fases clave que es muy recomendable considerar y que veremos en los siguientes puntos.
Empecemos por la base. Una estrategia sirve para hacer las acciones correctas y una táctica para hacer correctas las acciones. Una estrategia de datos es adecuada para hacer las acciones correctas y convertir los datos en insights accionables para la empresa u organización. Una estrategia de datos sólida debe ser accionable para tu empresa y debe evolucionar de tal forma que sea capaz de concentrar fuerzas disruptivas para tu sector. En las 4 fases a las que me refería al principio debemos tener siempre en cuenta unos elementos clave que, finalmente, dictarán sentencia sobre si nuestra estrategia va a ser exitosa o no.
Estos elementos clave que debemos tener siempre presentes son: las personas, los procesos, la tecnología y, por supuesto, los datos.
1. Organizar y descubrir
En esta fase debemos llevar a cabo dos tareas simultáneamente fundamentales en cuanto a organización, tanto identificar y definir los objetivos de negocio como listar a los que van a ser nuestros partners y stakeholders impactados, además de definir el scope del proyecto y su programación. Por otra parte, tenemos que ser capaces de descubrir la tecnología que tenemos a nuestra disposición para alcanzar los objetivos que nos hemos marcado y los activos digitales y sus roles en la estrategia de datos que vamos a construir. Si profundizamos un poco más en la parte de la definición de los objetivos de negocio tenemos que conseguir detectar los problemas y necesidades clave a los que nos enfrentamos así como nuestro objetivo principal para poder desbloquear valor para nuestro negocio a través de los datos. A nivel de partners y stakeholders es necesaria la máxima alineación que podamos conseguir, retener y contar con el mayor talento posible en los equipos implicados y convencer a aquellos grupos que nos pueden plantear problemas, es decir, aquellos que se oponen al cambio cultural dentro de la organización que una estrategia de datos plantea durante todo el proceso de implantación y transformación.
2. Evaluación de los activos digitales
En esta fase, nos centraremos, principalmente, en los procesos de negocio, fuentes de datos, activos de datos, activos tecnológicos, capacidades y políticas. El propósito de este ejercicio es analizar el estado en el que nos encontramos y cuál es el estado en el que queremos estar en el futuro. Por ejemplo, si el scope de la estrategia de datos es conseguir una visión 360 de nuestros clientes y potenciales, deberemos tener en cuenta cualquier activo que se vea impactado por procesos de negocio, activos de datos incluyendo su arquitectura, capacidades de los equipos de negocio e IT y las normas y políticas que impacten sobre nuestros clientes. Esta fase suele involucrar a los departamentos responsables de adquisición, retención y procesos de clientes. Un detalle muy relevante, en el que tendremos que fijarnos, es si las personas de cada uno de los departamentos que forman la empresas son data evangelists por naturaleza o no, si esas personas realmente creen en el poder de los datos para tomar decisiones y van a ser capaces de utilizar el ‘’data & analytics’’ de una forma potente que consiga ese valor deseado. Debemos tomar nota de las personas capaces de conseguirlo y de contar con su ayuda en posteriores fases para instaurar una cultura data-driven dentro de toda la organización.
3. Análisis, priorización y roadmap
Esta fase es, probablemente, la más intensa y, sin duda, la más importante de todas a la hora de llevar a cabo la estrategia de datos. Con el big data y el cloud computing el análisis se ha vuelto más complejo que en el pasado. Con la vista puesta en el estado futuro al que queremos llevar a nuestra organización, debemos centrarnos en analizar e identificar los gaps que podemos tener en cuanto a arquitectura de datos, tecnología y herramientas, procesos, formación y capacidades de las personas que nos rodean. El big data nos ha traído nuevas fuentes de datos de las que antes no disponíamos o no sabíamos explotar y el Cloud nos ha abierto un mundo de posibilidades en cuanto a almacenamiento e integración de los datos.
El gap analysis puede presentarnos múltiples opciones e iniciativas posibles y la siguiente tarea es priorizar esas opciones mediante objetivos de negocio principales como criterio. Los partners y stakeholders juegan un papel fundamental a la hora de priorizar las iniciativas basadas en los datos. El resultado final de esta fase es el roadmap de todo lo mencionado anteriormente y el accionado de las iniciativas como pueden ser el Data Governance, Data Quality o el MDM (Master Data Management).
4. Gestión del cambio
Por último, y como habéis podido ir comprobando de lo fundamental de las personas implicadas en cada una de la fases así como el cambio cultural que se plantea, las estrategias de datos chocan con el foco que históricamente se ha hecho en cuanto a gestión del cambio dentro de las empresas.
La gestión del cambio, como habéis adivinado, se refiere a coordinar cambios de tipo organizacional, cultural, tecnológicos y de procesos de negocio además de otros componentes como el gobierno de los datos, la usabilidad, la integración y la seguridad de los datos como otros de los aspectos importantes con los que tendremos que lidiar. Por lo que para realizar con éxito toda esta gestión serán necesarios los incentivos adecuados y los kpi´s y métricas de cualquier programa de gestión del cambio para controlar la evolución.
Por último, espero que te haya sido útil la experiencia de un digital analyst ante estos grandes acontecimientos que todos estamos viviendo día a día independientemente del rol que tengamos dentro de las organizaciones, si te encuentras inmerso en algunas de las etapas de transformación anteriormente descritas o estás apunto de afrontar el reto. Nos gustaría que nos contases tu experiencia, cómo te ha impactado el proceso en tu empresa o los retos a los que has tenido que enfrentarte desde tu posición, qué cambios culturales o tecnológicos has vivido y, por supuesto, si finalmente el proceso fue o puede considerarse un éxito.