Usamos cookies. Tienes opciones. Las cookies nos ayudan a mantener el sitio funcionando sin problemas e informar sobre nuestra publicidad, pero si deseas realizar ajustes, puedes visitar nuestro Aviso de cookies para más información.
Utilizamos cookies propias y de terceros para analizar su actividad en el sitio web con el objetivo de enviarle publicidad personalizada y mejorar el funcionamiento de la web. Puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “ACEPTAR” o seleccionarlas en función de su funcionalidad pulsando el botón “AJUSTES”.
×

Conceptos sobre la definición de una estrategia CRO para comercio electrónico

El CRO (Optimización de Ratios de Conversión) es una práctica revolucionaria. Esta aseveración puede parecer exagerada, pero, debemos tener en cuenta que el crecimiento de cualquier ecommerce, normalmente se suele poner en manos de campañas de marketing o de revisiones y rediseños de equipos de diseñadores UX/UI. El CRO es revolucionario y profundamente útil porque por primera vez contamos con una estrategia que permite definir campañas de crecimiento apoyadas en datos y monitorizadas de manera eficaz en todo momento por expertos analistas. Es decir, el CRO a través de la realización de tests A/B, nos permite descubrir si las estrategias de crecimiento que elegimos para nuestro producto electrónico están siendo óptimas y realmente beneficiosas.

cro-comercio-electronico-intro

Lo primero que se debe definir cuando se planifica una estrategia de CRO es, ¿cuántos recursos debo invertir para cada uno de los cambios que quiero testear? Por ejemplo, no es igual de costoso plantear el rediseño de un formulario, que experimentar con los CTA de tu web. Así que una vez identificadas esas tareas que por complejidad tardaremos semanas en tenerlas listas, debemos en paralelo empezar a testear aquellos puntos de mejora que sí que se puedan abordar rápidamente y sin tanto esfuerzo de diseño y desarrollo. Algunas de estas tareas podrían ser; el rediseño de algunos botones, pruebas de copywriting, cambios el orden en el que se muestra la información en una ficha de producto, pruebas de imágenes, etc. La maquinaría debe empezar a rodar cuanto antes.

Una vez que sabemos qué queremos testear, nos surge la duda de, ¿cómo vamos a medirlo? Debemos elegir cuáles van a ser los objetivos que van a decidir si nuestro test está mejorando o no nuestro objetivo de conversión. A estos objetivos los conocemos como KPI (Indicador Clave de Rendimiento). Cada test tiene sus propios KPI’s, aunque hay algunos generales que podemos utilizar en todos ellos como puede ser el ratio de “añadir al carrito” de nuestro producto, o el ratio de “productos vistos” por cada usuario.

Para calcular el ratio o porcentaje de conversión utilizamos esta expresión: (Conversiones / Visitantes únicos) * 100

cro-comercio-electronico-content

Cuando nuestro test esté activo, debemos monitorizar sus resultados periódicamente, y no debemos darlo por concluido hasta que los principales KPI’s hayan alcanzado confianza estadística. En caso de que el resultado haya sido positivo, una posibilidad es utilizar alguna de nuestras herramientas de personalización para añadir este cambio de forma permanente en la web. Si por el contrario, el test nos ofrece unos resultado de conversión negativos, estos resultados nos servirán como un valioso aprendizaje a la hora de proponer y definir futuros tests, porque de nuevo, en el CRO la maquinaria nunca debe dejar de rodar.


*Fuentes bibliográficas:

Tayar, Ricardo (2020). CRO profesional estrategia y práctica. Anaya

Pexels

Unsplash

En nuestra compañía